jueves, 7 de noviembre de 2013

HISTORIA AMBIENTAL

La historia ambiental parte de la interpretación de la naturaleza, como un agente histórico de cambio; debido a que trasciende la concepción de la naturaleza como el escenario, sobre el cual se desarrollan las acciones humanas; para entenderla como un factor histórico que constituye relaciones de mutua influencia con los seres humanos; que cambia con transformaciones provocadas por ellos y que de cierta manera tiene un impacto sobre las sociedades. A manera de ejemplo: Alrededor de 1987 se realizó la construcción de una carretera entre la ciudad de Barranquilla ( Atlántico ) y la ciudad de Santa Marta ( Magdalena ), hecho que ocasionaría ciertas consecuencias ambientales en la zona de los ecosistemas de la ciénaga grande del Magdalena. De manera que a partir de esto surgieron impactos trascendentales como la alteración hídrica de la ciénaga y la Isla de Salamanca; la transformación completa del paisaje, la alta salinidad se concentró en los suelos del mar y el agua dulce, que llegaba del Río Magdalena; había dejado de fluir a causa del taponamiento de algunos canales. Pero sin duda lo que lo catalogo entre los impactos más grandes del país, fue la construcción de esta carretera. Se destruyeron miles de hectáreas del extenso manglar de la Ciénaga Grande del Magdalena, por lo tanto esta construcción interrumpió el intercambio de agua a través de caños y ciénagas, perjudicando a un gran número de pescadores de la zona; debido a que el ecosistema de la Ciénaga presento problemas de ausencia de oxigeno generando la mortandad de miles de especies. Como una iniciativa de rescatar parte del extenso manglar de la ciénaga surgió el parque natural Isla de Salamanca que está localizado entre la ciudad de Barranquilla (Atlántico) y el municipio de Ciénaga en el departamento del Magdalena. La biodiversidad de los ecosistemas del Parque, hicieron que la UNESCO lo declarara Reserva de Biosfera, protegiendo así una de las riquezas naturales, científicas y culturales más productivas del Caribe. Este parque se convirtió en la oportunidad de rescatar muchos ecosistemas de manglar perdidos y también en una gran opción de ecoturismo en la zona.


















    Isla Salamanca Ciénaga grande de Santa Marta 

CARRETERA BARRANQUILLA, CIÉNAGA Y SANTA MARTA”
La construcción de infraestructuras y las actividades necesarias para que una zona sea accesible por vía terrestre, ha inducido a la creación de nuevas carreteras de comunicación, las cuales han generado deforestación y a menudo han implicado abrir camino a través de manglares.  Algunas de estas carreteras, se han construido de tal manera que bloquean la circulación natural del agua; inundando así, un lado de la carretera, mientras que la vegetación del lado opuesto se ve totalmente privada del agua.  En la parte inundada los bosques mueren de asfixia y, en el otro lado, la vegetación muere a causa de sequía. 

Daño de manglares tomado de:
EMISIÓN DE METANO Y ÓXIDO NITROSO DE LOS SEDIMENTOS DE MANGLAR DE LA CIÉNAGA GRANDE DE SANTA MARTA, CARIBE COLOMBIANO 

Dicha situación se presentó en 1995, como consecuencia de la construcción de la carretera que comunica Barranquilla, Ciénaga y Santa Marta, en donde se perdieron alrededor de 333 km2 de mangle; que finalmente resultaron deteriorando todo un ecosistema natural. 
En la actualidad, las hectáreas afectadas han sido regeneradas gracias a la cooperación del parque nacional Isla de Salamanca, recuperando así gran parte de la biodiversidad característica del lugar. Las 400.000 hectáreas del Sistema Delta Estuarino del Río Magdalena y la Ciénaga Grande de Santa Marta, del cual hace parte, fueron declarados sitios Ramsar de importancia mundial y Reserva del Hombre y la Biosfera ya que el parque comprende un variado ecosistema marino y terrestre, siendo los principales manglares y humedales, propios de zonas inundables por la marea.
las islas de salamanca en realidad es un conjunto de pequeñas islas separadas entre si por angostos canales que se forman en el pleistoceno por acumulacion de sedimentos del rìo Magdalena, cuya altura no supera los 6msnm; estas  islas conforman la barrera natural que separa la Cienaga Grande de Santa Marta del Mar Caribe pero manteniendo intercambio de aguas. Sin embargo los Terraplenes de la carretera, la cual se construyò tiempo antes de ser declarada zona protegida, han obstaculizado la dinàmica de aguas y causa alta salobridad en la ciènaga. de igual manera el taponamiento de los cabales que unen el Magdalena y la Ciènaga agrava la situación, es por esta razòn que en muchas partes el manglar ha muerto.
Los pantanos de agua dulce son bastantes productivo, en sus orillas crecen eneas, juncos y otras hierbas flotantes, las cuales son una importante estación de aprovisionamiento para las aves migratorias. 

Historia ambiental de Manaure
Las Salinas de Manaure se encuentran ubicadas en el departamento de la Guajira, y son consideradas una de las principales actividades económicas del sector.  Gracias a su ubicación costera, allí se hace provecho de la sal que se puede adquirir a partir del agua de mar, mediante la evaporación solar; y a su vez, se tienen en cuenta otros factores como la temperatura, el viento, la humedad relativa y la lluvia. 
La recolección manual se realiza con personal de la región, principalmente con indígenas Wayuu, y su producción anual es cercana a las 60.000 toneladas.  Por otro lado, la recolección mecanizada se realiza con un sistema combinado de buldócer y cargador,  en donde la producción promedio es de 450.000 toneladas por año. Su comercialización básicamente, es para el consumo ganadero.
El resultado final de la sal, era transportado por vías marítimas y terrestres, sin embargo, en la actualidad el muelle que poseen de fácil acceso, no se encuentra en funcionamiento. 


     Banda Transportadora de sal en Manaure- La Guajira.


 “CULTURA WAYÚU”.
El determinismo ambiental se encarga de describir la organización económica y social de las comunidades con base a las características del medio ambiente en donde se asientan. [5] En pocas palabra, este define que las condiciones naturales o físicas  de un territorio, establecen las diferentes actividades humanas sobre dicho lugar. [6] Un ejemplo de lo anterior son los Wayúu, comunidad indígena perteneciente al departamento de la Guajira; la cual se ha adaptado a un hábitat en un escenario tan extremo como el desierto. Este grupo cultural es vinculado principalmente a la cría de ganado caprino, el pastoreo y la siembra de  maíz, fríjol, yuca, pepino, ahuyama, melón y sandía.  Sin embargo, el horario en que se lleva a cabo las actividades de trabajo, difieren de los horarios laborales de las sociedades andinas; en la forma como desarrollan las jornadas, este fue dividido en dos horarios.  El primero inicia a tempranas horas en la mañana, y la segunda jornada comienza luego de que el sol haya bajado su intensidad.
Por otro parte, la distribución demográfica de los Wayúu  en la península se encuentra íntimamente relacionada con los cambios estacionales; durante la época de sequía (diciembre-abril) y de escases de pastos, la mayoría de los indígenas buscan trabajo, trasladándose así a otras ciudades o pueblos como Maracaibo; pero cuando llega el tiempo de lluvias,(septiembre-diciembre y mayo-septiembre), un gran número de ellos retorna a sus hogares. [3] Como consecuencia de dicho periodo tan corto de lluvias, las  al río Ranchería y los pozos subterráneos son el determinante ecológico que condiciona la subsistencia y poblamiento en diversos sectores de la región. 

 

   Piscinas en la región de Manaure para la extracción de sal.

Manaure inició como un pueblo nómada conformado por indígenas, remontándose a 1723 los primeros indicios de habitantes no indígenas en el lugar. Cuentan las historias que el grupo que ocupaba el Cabo de la Vela y en ese entonces el llamado Valle de Upar, llevaban sal al interior para intercambiarla por oro, en principio la explotación de sal en la Guajira se produjo en lagunas naturales, en las cuales cuando había marea alta el mar ingresaba en ellas y dejaba residuos de peces y camarones, comida para los pescadores indígenas.
El Municipio de Manaure fue creado mediante la ordenanza 017 de 1973, la cual empezó a regir desde el 1 de octubre de 1974. El clima de Manaure es caliente refrescado por brisas oscilando su temperatura entre 27 y 35 grados centígrados, por lo que la evaporación es muy alta y las lluvias son escasas. En general es una llanura plana pedregosa y suavemente ondulada, en la que predominan las dunas del litoral, las lagunas marinas, playones arcillosos y salinas entre el Pájaro y Mayapo” .
El Municipio está rodeado del Mar Caribe que bordea la costa siendo la fuente más abundante de agua en el sector y la cabecera municipal es atravesada por el arroyo limón que luego desemboca a orillas del mar. La flora está dominada por cactus, tunas hay trupillo (árbol propio del desierto guajiro) lo que favorece al cultivo de sábila y aloe vera. Se destacan en la zona las playas de Musichi y las del Pájaro en la que se pueden observar los hermosos Flamencos rosados.



                    Piscinas,para la extracción de sal.

En el corregimiento del Pájaro existe una de las grandes reservas de gas en el país, eso y además su importante explotación de sal marina al ser un gran porcentaje de la sal que consume Colombia producida allí, son por las cosas por las que más se reconoce a Manaure.
De acuerdo a la geografía en la que se interroga por el significado de la presencia de los hombres en la tierra, y el sentido de su existencia analizaremos el laudo arbitral proferido como consecuencia del conflicto entre SAMA LTDA., la asociación de autoridades tradicionales indígenas Wayuu del área de influencia inmediata de las salinas de Manaure SUMAIN –ICHI-, la Asociación indígena de la Guajira Waya Wayuu y la Asociación de charqueros explotadores de Sal de Manaure, la Guajira –ASOCHARMA-, (LAUDO ARBITRAL 2009) conflicto entendido de acuerdo a la geografía como el desajuste entre lo que el hombre es en las sociedades capitalistas y lo que el hombre puede ser.
Este conflicto consistió, en primer lugar en un acuerdo entre el Gobierno Nacional y la comunidad indígena de la zona de formar una sociedad de economía mixta por medio de la cual se iba a realizar la explotación, transformación y comercialización de la sal marina en la zona. Acuerdo que no se cumplió sino hasta el año 2004 tras una serie de solicitudes de la comunidad para iniciar el proceso de constitución de la sociedad limitada, el cual resulta ser el mecanismo idóneo para la explotación de sal en el Municipio, todo lo anterior tras diferentes tutelas y controversias jurídicas.
Tras la constitución de la sociedad de economía mixta por medio de la cual el Estado mediante los Ministerios competentes para desarrollar esta labor, comprendería no menos del 51%, la comunidad indígena Wayuu el 25% y el resto para un operador privado quien operaría como concesionario de la explotación de sal en el Municipio de Manaure, ayudando además con capital y con los mecanismos y tecnología requerida para esta labor.

     
                     Proceso de transporte de sal.

El conflicto partió principalmente de la renuencia u omisión de la Comunidad indígena de contratar al operador privado para el desarrollo de esta labor de explotación natural, por lo que se acudió ante un tribunal de arbitramento con miras a solucionar la controversia. La comunidad indígena argumentaba que no debían ser obligados a contratar con el particular, que el Estado debía repararlos como consecuencia de la demora en constituir la sociedad teniendo en cuenta que el acuerdo por medio del cual se estableció la constitución de la sociedad era del año 1991 y la sociedad se constituyó en el 2004 y por último que la cláusula que los obligaba a contratar con el operador privado era ineficaz. El tribunal de arbitramento absolvió al Estado.

De acuerdo al criterio de la geografía  consideramos que en el conflicto se plantea la clara subordinación y desigualdad material y jurídica en la que se encuentran los indígenas, teniendo en cuenta su carácter de sujetos protegidos humanitariamente en el ámbito internacional, ellos no deberían por qué estar obligados a desarrollar un determinado tipo de conductas a favor de particulares quienes solo buscan su lucro particular. Bastaría con un acuerdo entre el Estado y la comunidad indígena para desarrollar la explotación y comercialización de la sal marina, por su condición innata debería corresponderles a los indígenas que han vivido en el lugar durante años la explotación económica de la zona y no a particulares oportunistas. 


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